Elegir los colores para tu casa es muy importante Deben elegirse pensando en las sensaciones que se desean transmitir y en las actividades que se realizarán en la habitación.
Los colores fríos son ideales para el dormitorio, convirtiéndolo en un espacio relajante y fresco. Además, al incluir un poco de blanco ganarás luminosidad.
Si tienes un despacho, pinta las paredes con colores que estimulen la creatividad y el cerebro para favorecer la actividad.
El color de la habitación del bebé ayudará a su desarrollo y estimulación. Colores como el blanco o beige le ayudarán a relajarse y calmarle.